Mejorando mi forma: mi resistencia

Muchas veces vemos que la gente acude a los gimnasios para ponerse en forma. Tú puedes aprovechar las clases de educación física y mejorar tu condición física. Ya sabemos que cuando nos movemos no sólo mejoramos la resistencia, si no también la fuerza, la flexibilidad, la coordinación, la agilidad y por que no la velocidad.


¿Cómo es posible? El cuerpo es muy sabio y como has aprendido en Ciencias Naturales actúa como un todo organizado en sistemas y con funciones muy interrelacionadas entre sí para moverse de forma eficaz y fluida en el espacio que le rodea.
Nosotros para saber un poco más de su funcionamiento, vamos a dividirlo en varias partes acorde con los síntomas que se originan tras la actividad física y el deporte.
Es por ello que hablamos de Resistencia cuando realizamos algún ejercicio físico de una duración prolongada en el tiempo, ya que mi cuerpo es capaz de aguantar la fatiga al esfuerzo, e inclusive una vez cesada la actividad o ejercicio o deporte se recupera fácilmente.
O sea que yo tendré mejor resistencia si aguanto más y me recupero antes.

Pero, ¿qué actividades puedo hacer para mejorar mi resistencia?
La resistencia suele valorarse con indicadores de la frecuencia cardíaca, bien sea con un pulsómetro o contando las pulsaciones por minuto realizadas. Podemos utilizar también mediciones de lactato, pero esto sería técnicas de laboratorio que en el Centro Escolar no tenemos ni tiempo para hacerlas. Inclusive de forma indirecta también sabemos cuánto consumo de oxígeno hemos realizado en la actividad. (Ya hay unas tablas estandarizadas que nos ayudan a ello, acordes con el tiempo empleado)
Bien, frecuencia cardíaca, consumo de oxígeno: dos conceptos a emplear. Pero nos seguimos preguntándonos ¿cuáles son las actividades?
Mira si juntamos la duración de la tarea y la frecuencia cardíaca vemos que la Resistencia se caracteriza en :
a) Tareas corta duración y frecuencia cardíaca alta: podemos hacer una tarea muy rápida, parar y cuando nos recuperamos poder repetirla; e inclusive intentarlo varias veces. Por ejemplo saltando a la comba.

b) Tareas de media duración: la intensidad del trabajo disminuye, aguanto más, pero ya no puedo repetirla tantas veces como antes. Por ejemplo una clase de circuito

c) Tareas de duración larga: la intensidad del trabajo suele ser baja, pero a medida que tengo mejor forma puedo aumentar la intensidad, y aguanto muchísimo más, pero no creo que sea capaz de repetirla más que una vez. Por ejemplo: corremos por el parque o patio o realizamos una clase de fittness (aeróbic,zumba,...)






 
¿Podemos escoger sólo una?
Verás como desarrollamos toda nuestra musculatura y mejoramos nuestro sistema cardiovascular para tener mejor forma física, realizando numerosas actividades y variadas.
Así aseguraremos mejorar recuperándonos fácilmente de la actividad realizada.
Te preguntarás ¿y puedo practicar algún deporte para mejorar la resistencia? 
Hazlo, observa la duración de tu actividad, tu frecuencia cardíaca y cómo te recuperas de la fatiga.